De la tokenización a la innovación en el mercado de valores: reconsiderando los límites entre lo público y lo privado
La historia del mercado de valores público en Estados Unidos se remonta a la década de 1920. En ese momento, cualquier persona podía financiar proyectos vendiendo acciones al público, una práctica que a menudo venía acompañada de promesas engañosas. Después del colapso del mercado de valores en 1929, para restaurar la confianza en el mercado, el Congreso aprobó una serie de leyes para regular el mercado de valores público. Estas regulaciones requerían que las empresas que cotizaban en bolsa divulgaran detalles comerciales, publicaran estados financieros auditados y anunciaran eventos significativos, para garantizar que los inversores pudieran estar debidamente informados.
Sin embargo, con el paso del tiempo, la importancia del mercado privado ha ido en aumento. En la actualidad, la mejor manera de financiarse podría ser obtener fondos directamente de grandes instituciones de inversión, sin necesidad de hacer públicos los informes financieros o enfrentarse a los inversores minoristas. Muchas empresas tecnológicas de renombre han podido financiar miles de millones a una valoración extremadamente alta, sin necesidad de realizar una oferta pública.
Esta tendencia ha tenido un cierto impacto en los inversores públicos. Los inversores comunes tienen dificultades para invertir directamente en aquellas empresas privadas que reciben mucha atención, y solo pueden comprar participaciones fragmentadas a precios elevados a través de canales no oficiales. Por lo tanto, ha ido surgiendo la opinión de que el crecimiento económico moderno está impulsado en gran medida por las empresas privadas, y que las empresas con mayor potencial suelen ser privadas, lo que impide la participación de los inversores comunes, una situación que necesita cambiar urgentemente.
¿Cómo cambiar esta situación? Algunas posibles soluciones incluyen: simplificar el proceso de cotización, aumentar los requisitos de divulgación de información para las empresas privadas, reestructurar la economía y la distribución de la riqueza, entre otros. Sin embargo, estas soluciones enfrentan sus propios desafíos y compensaciones.
Recientemente, la industria de las criptomonedas ha propuesto una nueva idea: recaudar fondos a través de la emisión de "Token" (un certificado de derechos económicos similar a las acciones) sin necesidad de cumplir completamente con las leyes de valores tradicionales. Aunque este enfoque ha generado controversia, parece estar ganando un nuevo impulso de desarrollo.
Algunas empresas de tecnología financiera han comenzado a intentar lanzar servicios de tokenización de acciones, permitiendo a los usuarios comerciar con Token de acciones, incluidas las de empresas privadas. Los defensores de este enfoque creen que puede brindar a más personas la oportunidad de invertir en empresas privadas de alto potencial, promoviendo así la democratización de la inversión.
Sin embargo, este enfoque también ha suscitado algunas dudas. Los críticos señalan que "permitir que el público invierta en empresas privadas" es en sí mismo una paradoja, ya que la característica central de las empresas privadas es que no están abiertas al público y no están sujetas a las restricciones de divulgación de las empresas que cotizan en bolsa. Por lo tanto, "permitir que el público invierta en empresas privadas" equivale en realidad a "permitir que las empresas vendan acciones al público sin divulgar información".
A pesar de esto, muchos magnates de las finanzas siguen promoviendo activamente la tokenización, creyendo que puede eliminar las barreras de inversión y permitir que más personas obtengan altos rendimientos. Creen que las reglas de divulgación actuales pueden estar desactualizadas y obstaculizan la innovación.
Actualmente, en Estados Unidos, no se permite la venta directa al público de acciones de empresas privadas a través de "Token" sin divulgación. Sin embargo, con el impulso del concepto en el ámbito financiero y la apertura gradual del entorno regulatorio, la dirección futura sigue siendo digna de atención.
Al mirar hacia atrás en la historia, podemos ver que el mercado siempre está en constante evolución. Actualmente, la industria financiera parece estar buscando una manera de redefinir la divulgación de información y las reglas de negociación en el mercado de acciones, acercándose más al nuevo mercado de activos digitales. Si esta tendencia cambiará finalmente el panorama de los mercados financieros que conocemos, aún está por verse con el tiempo.
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EntryPositionAnalyst
· 07-08 14:18
Comercio de criptomonedas es mejor que comercio de propiedades
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DeFi_Dad_Jokes
· 07-08 14:15
tontos nunca serán esclavos!
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GateUser-beba108d
· 07-08 14:08
¿Financiar o tomar a la gente por tonta?
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LiquidityWizard
· 07-08 13:55
La financiación es un juego para grandes inversores.
Tokenización reconfigura el mercado de acciones: un nuevo equilibrio entre lo público y lo privado
De la tokenización a la innovación en el mercado de valores: reconsiderando los límites entre lo público y lo privado
La historia del mercado de valores público en Estados Unidos se remonta a la década de 1920. En ese momento, cualquier persona podía financiar proyectos vendiendo acciones al público, una práctica que a menudo venía acompañada de promesas engañosas. Después del colapso del mercado de valores en 1929, para restaurar la confianza en el mercado, el Congreso aprobó una serie de leyes para regular el mercado de valores público. Estas regulaciones requerían que las empresas que cotizaban en bolsa divulgaran detalles comerciales, publicaran estados financieros auditados y anunciaran eventos significativos, para garantizar que los inversores pudieran estar debidamente informados.
Sin embargo, con el paso del tiempo, la importancia del mercado privado ha ido en aumento. En la actualidad, la mejor manera de financiarse podría ser obtener fondos directamente de grandes instituciones de inversión, sin necesidad de hacer públicos los informes financieros o enfrentarse a los inversores minoristas. Muchas empresas tecnológicas de renombre han podido financiar miles de millones a una valoración extremadamente alta, sin necesidad de realizar una oferta pública.
Esta tendencia ha tenido un cierto impacto en los inversores públicos. Los inversores comunes tienen dificultades para invertir directamente en aquellas empresas privadas que reciben mucha atención, y solo pueden comprar participaciones fragmentadas a precios elevados a través de canales no oficiales. Por lo tanto, ha ido surgiendo la opinión de que el crecimiento económico moderno está impulsado en gran medida por las empresas privadas, y que las empresas con mayor potencial suelen ser privadas, lo que impide la participación de los inversores comunes, una situación que necesita cambiar urgentemente.
¿Cómo cambiar esta situación? Algunas posibles soluciones incluyen: simplificar el proceso de cotización, aumentar los requisitos de divulgación de información para las empresas privadas, reestructurar la economía y la distribución de la riqueza, entre otros. Sin embargo, estas soluciones enfrentan sus propios desafíos y compensaciones.
Recientemente, la industria de las criptomonedas ha propuesto una nueva idea: recaudar fondos a través de la emisión de "Token" (un certificado de derechos económicos similar a las acciones) sin necesidad de cumplir completamente con las leyes de valores tradicionales. Aunque este enfoque ha generado controversia, parece estar ganando un nuevo impulso de desarrollo.
Algunas empresas de tecnología financiera han comenzado a intentar lanzar servicios de tokenización de acciones, permitiendo a los usuarios comerciar con Token de acciones, incluidas las de empresas privadas. Los defensores de este enfoque creen que puede brindar a más personas la oportunidad de invertir en empresas privadas de alto potencial, promoviendo así la democratización de la inversión.
Sin embargo, este enfoque también ha suscitado algunas dudas. Los críticos señalan que "permitir que el público invierta en empresas privadas" es en sí mismo una paradoja, ya que la característica central de las empresas privadas es que no están abiertas al público y no están sujetas a las restricciones de divulgación de las empresas que cotizan en bolsa. Por lo tanto, "permitir que el público invierta en empresas privadas" equivale en realidad a "permitir que las empresas vendan acciones al público sin divulgar información".
A pesar de esto, muchos magnates de las finanzas siguen promoviendo activamente la tokenización, creyendo que puede eliminar las barreras de inversión y permitir que más personas obtengan altos rendimientos. Creen que las reglas de divulgación actuales pueden estar desactualizadas y obstaculizan la innovación.
Actualmente, en Estados Unidos, no se permite la venta directa al público de acciones de empresas privadas a través de "Token" sin divulgación. Sin embargo, con el impulso del concepto en el ámbito financiero y la apertura gradual del entorno regulatorio, la dirección futura sigue siendo digna de atención.
Al mirar hacia atrás en la historia, podemos ver que el mercado siempre está en constante evolución. Actualmente, la industria financiera parece estar buscando una manera de redefinir la divulgación de información y las reglas de negociación en el mercado de acciones, acercándose más al nuevo mercado de activos digitales. Si esta tendencia cambiará finalmente el panorama de los mercados financieros que conocemos, aún está por verse con el tiempo.